Cuando se piensa en decorar la casa, el cuarto de baño no es necesariamente la primera habitación que viene a la mente. Aunque no se deja nada al azar en términos puramente prácticos, el estilo a menudo se deja de lado. Sin embargo, se trata de una estancia central de la casa, reservada al recogimiento y la tranquilidad. Ya sea para lavarse los dientes unos minutos o para relajarse durante horas en la bañera, el baño verde se convierte en el lugar ideal para recargar las pilas lejos del estrés. Algunas personas lo han entendido y consiguen transformar su zona de ducha en un auténtico spa en casa. ¿Quiere hacer lo mismo? No hace falta invertir en un hammam o una sauna. Sólo necesita unos pocos elementos para crear una burbuja de tranquilidad en su casa. Regálate un capullo de relajación: Blanc Cerise comparte todos sus consejos para renovar tu cuarto de ducha.
Elige colores relajantes
Los baños zen y los tonos llamativos rara vez combinan bien. De hecho, los colores chillones en decoración tenderán más fácilmente a cansar la vista. Pero lo que realmente queremos es una habitación lo más serena posible. ¿La solución? Apuesta por tonos sutiles que te animen a dejarte llevar.
En cuanto a colores relajantes, nada mejor queel blanco. Simbólicamente asociado a la sencillez y la serenidad, ilumina y aporta volumen de forma natural a la habitación. Una ventaja significativa, dadas las reducidas dimensiones de la mayoría de los cuartos de baño. Gris antracita, beige, topo… Los tonos neutros también son favoritos seguros de los que no nos cansamos. Y para los que quieran atreverse con el color sin quedar mal, el verde salvia y el azul pato son perfectos para unadecoración de baño zen. Colores oscuros más difíciles de dosificar, pero ideales para configurar unintimo cozy.
Si no sabescómo combinar colores, puedes optar por una decoración monocromática. Siempre que rompas la monotonía y añadas relieve con elementos coloridos: las toallas de baño, por ejemplo, tienen un potencial decorativo insospechado. Versión hammam con flecos, texturas de nido de abeja con aire japonés o de rizo para un ambiente 100% spa, tú decideselige tu albornozyelige tu alfombra de baño en función del ambiente y la armonía cromática que desees.
Selecciona materiales naturales
Habitación zen por excelencia, el baño relajante se inspira plenamente en la naturaleza. Resistente, a veces exótica, pero siempre cálida, la madera en bruto no tiene igual para tranquilizarnos. La elegimos clara u oscura en función de la luz natural de la habitación. Los muebles y accesorios de bambú también encuentran su lugar.
El otro invitado de lujo no es otro quela piedra natural. Granito, pizarra, mármol… Combina de maravilla con la madera. Mención especial merece el suelo de canto rodado: elegante y exótico a la vez, este tipo de revestimiento se integra a la perfección en una ducha a ras de suelo.
Añada un toque de suavidad con muebles de líneas redondeadas. Espejos, lavabos, bañeras… ¡Deja paso a las curvas y a los diseños minimalistas! Consejo Blanc Cerise: amplía el aspecto auténtico y orgánico de tu decoración con plantas verdes. Las plantas colgantes aportan verdor al cuarto de baño sin recargar el espacio. El ambiente cálido y húmedo obliga, sólo recuerda adoptar las variedades adecuadas: helecho, hiedra, aloe vera, pothos… Grandes aliadas, que cambiarán al instante tu baño enun remanso de paz.
Instaura un ambiente tenue
Para decorar con éxito tu baño zen, evita la iluminación demasiado agresiva. Focos, zócalos led, apliques, plafones… En su lugar, intenta establecer un discreto juego de luces que te anime a bajar el ritmo y tomarte un momento para ti. ¿Una buena idea? Combina una iluminación funcional (blanco neutro) y otra de ambiente (blanco cálido).
No te compliques: di adiós a las antiestéticas luces de neón en favor de una iluminación moderna que se integre en la decoración. Como toque final, coloca unasvelas para encenderlas mientras te das un baño.
Mantén tu baño ordenado
Un baño zen es, ante todo, un baño ordenado. Decimos adiós a los cestos de la ropa sucia desbordados, a las estanterías sobrecargadas y a los geles de ducha amontonados en el borde de la bañera. ¿El objetivo? Un ambiente despejado, que tranquilice la mente e invite inmediatamente al ensueño.
Deshazte de todo lo superfluo: elimina todos los objetos que no pertenezcan al cuarto de ducha. Desordena la habitación, organiza los cajones con compartimentos y coloca los productos en bonitas cestas para que estén al alcance de la mano. Por último, pero no por ello menos importante, utiliza armarios cerrados para que todo tenga el mejor aspecto posible. Suficiente para mantener un interior agradable sin pasar horas en él.
Conseguir toallas de baño acogedoras
¿El enemigo número uno de tu escapada de relax? ¡La infame toalla que pica! No hay nada peor que limpiarse el cuerpo con una toalla de baño áspera al salir de la ducha. Franelas, toallas , albornoces… Son mucho más que objetos decorativos, son imprescindibles para el día a día. Así que más vale que apuestes por fibras de alta gama que te envuelvan en una sensación de confort incomparable. Apreciará aún más su momento de bienestar al final del día. El detalle que cuenta: no olvides cubrir tu suelo con una alfombra de baño gruesa .
Blanc Cerise te acompaña en tu búsqueda del baño zen perfecto: haz de cada ducha un puro momento de dicha con nuestracolección de ropa de baño de algodón orgánico. Absorbente, suave, duradera…Elegir la ropa de baño adecuada nunca ha sido tan fácil.