Cuando se trata de conciliar el sueño, hay dos tipos de personas: las que caen en los brazos de Morfeo en cuestión de minutos y aquellas para las que encontrar el sueño resulta ser una auténtica carrera de obstáculos. ¿Se encuentra usted en esta última categoría? Estrés, estilo de vida, ropa de cama… Hay muchos factores que afectan a nuestra capacidad para conciliar el sueño rápidamente. ¿Y si la temperatura del dormitorio también influyera? Conoce los pasos adecuados para mantener la temperatura ideal en tu dormitorio y en el del bebé.
¿Cuál es la temperatura ideal para un sueño reparador?
Según el INSV (Institut National du Sommeil et de la Vigilance), la temperatura ideal para un dormitorio es de 18°C.
La explicación: para conciliar un sueño profundo, nuestro cuerpo necesita perder entre 0,5 y 1°C. La temperatura corporal desciende ligeramente a lo largo de la noche, hasta que vuelve a subir de forma natural a partir de las 5 de la mañana. Como un despertador, este aumento de temperatura envía una señal clara al cuerpo: es hora de levantarse después de una buena noche de descanso. Así que evitemos los dormitorios sobrecalentados, que perjudican la calidad del sueño y favorecen el insomnio.
Ten cuidado de no caer en el otro extremo: una habitación helada no significa necesariamente una noche de sueño tranquilo. En un ambiente demasiado frío, el cuerpo intenta como puede producir calor, en lugar de bajar el ritmo para pasar la noche. Este proceso natural acaba retrasando el sueño. Resultado: te encuentras contando ovejas. Se trata de encontrar el equilibrio entre tu comodidad, tus hábitos y lo recomendable.
Regula según la estación del año
Ni mucho calor, ni mucho frío: como habrás comprobado, cuando se trata de la temperatura de tu dormitorio , todo es cuestión de equilibrio. Pero, ¿cómo reaccionar cuando el termómetro no da más de sí?
Calentar el ambiente en invierno
¿Eres de los que suben la calefacción en cuanto empiezan a bajar las temperaturas?Crear un ambiente acogedor y envolvente, por qué no; convertir la habitación en un auténtico horno, ¡mala idea! Intenta mantener un dormitorio a unos 18°C. Además de ahorrar energía , evitarás que se seque el aire ambiente, causa de posibles dolores de cabeza y garganta.
¿El truco para no pasar frío? Utilizar ropa de cama adecuada. Tus aliados para la temporada de frío: sábanas de satén de algodón lavado , un edredón de alta gama y una manta suave . Ya puedes decir adiós a los microdespertares.
Los reflejos adecuados en verano
En plena ola de calor, es difícil mantener una temperatura ideal en el dormitorio . Así se duerme rápido cuando hace calor :
● Dúchate con agua tibia antes de acostarte;
● Mantén el calor fuera cerrando las persianas durante el día y abriendo las ventanas por la noche;
● Expulsa el aire caliente con un ventilador colocado cerca de una ventana;
● Cuelga un paño húmedo cerca de una ventana abierta.
Si te preguntascuál es el mejor material para las sábanas en verano, la respuesta es obvia: apuesta por unaropa de cama de algodón percal.
¿Y para el dormitorio del bebé?
Como adultos, dormir bien es un factor esencial en nuestro estado físico diario. Y aunque el sueño es importante para el resto de nosotros, debes saber que lo es aún más para los niños pequeños. Los recién nacidos duermen mucho, a veces hasta 20 horas al día. Necesitan este tiempo de descanso para desarrollarse correctamente.
La Seguridad Social francesa recomienda a los padres mantener una temperatura de 18 a 20 °C en la habitación del bebé. Esta temperatura es ligeramente superior a la recomendada para la habitación de un adulto. Y es normal: como el sistema termorregulador de los bebés aún no está completamente maduro, les costará más adaptarse a los cambios de temperatura. Por eso es fundamental proporcionarle un entorno ideal para descansar. Esto implica una temperatura estable, ropa cómoda y ropa de cama adecuada.
Una vez que el niño sea un poco mayor, un termostato regulado a 18 °C será suficiente. Y como quieres ofrecer lo mejor a tu pequeño, Blanc Cerise ha seleccionado para él ropa de cama para bebés de alta calidad. Decídete poruna funda nórdica para una cama evolutiva ouna funda nórdica 3-5 años. Nuestra visión: tejidos Oeko-Tex® respetuosos con la piel, ropa de cama infantil de colores suaves y resistente lavado tras lavado. Suficiente para ofrecer noches más tranquilas y serenas a nuestros hijos.